Las elecciones y la geografía (con François Valentin)
Contexto Condensado
En el decadente imperio americano, las predicciones electorales se empiezan marcando en el mapa los blue y red states tradicionales, y se busca mantener los propios y flip los ajenos. La palabra “tradicional” aquí, dada la corta historia democrática de los Estados Unidos, que es la más larga del mundo, pareciera de corto plazo; pero hay resultados de sus elecciones que se predicen con geografía formada hace millones de años.
El IGAC colombiano define: “La geografía es la ciencia que estudia las relaciones entre la sociedad y el espacio”. Las sociedades, como el espacio, se construyen con el paso del tiempo—o el tiempo pasa en la construcción de sociedades y de espacio, que es lo mismo. Pero me estoy adelantando: volvamos al principio. Este capítulo es el anexo del anexo de la serie sobre Ucrania. La serie empezó para entender la guerra actual ruso-ucraniana, que descubrimos que tiene sus orígenes en la formación de un mapa hace casi mil doscientos años, en una tierra que ha sido habitada por decenas de culturas durante milenios gracias a que siempre fue muy fértil. Casi 90 días después (nada, para el Tiempo), la guerra está estancada en el sitio del Donbás, aunque lejos de terminarse; los miedos de una guerra mundial están más controlados, aunque latentes.
Cubierta la historia de esta historia, empezamos un anexo a la serie que fue crimeo: en todas las lecturas se mencionó la península cuya historia de anexiones se remonta a hace casi dos mil cuatrocientos años y a su relación con los antiguos griegos. Dos historiadores y geógrafos de la antigua Grecia, Heródoto y Estrabón, nos acompañaron en el cierre, que terminó con una relación, impensada al principio, con las amazonas, el Amazonas, y la historia helénica de Sudamérica—o la historia sudamericana de Europa, que es lo mismo. En esta larga odisea, nos vimos envueltos en medio de las elecciones en Francia, influenciadas por la relación de los candidatos con Rusia, y en medio de críticas de unos historiadores a otros por no hacer bien su trabajo, por no ser rigurosos con las fechas, los detalles y la geografía. Ahora bien, ¿por qué insisto yo, ñoño de corazón—en inglés, nerd—, en la importancia de la conexión entre historia y geografía? Muchas veces me pregunto por qué me interesa tanto un tema para otros un tanto aburrido. La respuesta siempre se me revela en otras fuentes. Algunas veces esa fuente es Twitter, la bendita y macabra red social que mezcla en ella lo profundo y lo mundano, lo bueno y lo malo, los cortos memes y los largos estudios, lo frívolo y lo reflexivo, lo temporal y lo atemporal; y donde todo, como el ser humano, es político. Como es característico de nuestra era, en esa fuente, muchas veces lo que se muestra no requiere más contextos, ni más palabras, ni más explicaciones que la superposición de un par de imágenes y menos de 280 caracteres. Extraigo de allí el cierre de mi caso sobre la historia y la geografía, trabajo del francés François Valentin, que muestra cómo mapas de hace cientos y miles de años tienen correlación, y hasta predicen, todavía, las elecciones de hoy en día. Aunque miles de años es darle mucha importancia al ser humano en la construcción de su Historia: el último mapa que vemos, mapa económico-social-político (inseparables entre sí), muestra un cordón blue en medio de un red state que se formó hace cien millones de años.
El hilo tuitero, del que vemos un extracto, menciona Alemania, Francia, Polonia, Lituania, Ucrania y Estados Unidos, estados en esta serie mencionados. Demuestra, como siempre decimos, que todo está conectado. El pasado forma el presente que forma el futuro, que se parecerá al pasado. El sitio de Ucrania sigue, mon siège est fait.
En el decadente imperio americano, las predicciones electorales se empiezan marcando en el mapa los blue y red states tradicionales, y se busca mantener los propios y flip los ajenos. La palabra “tradicional” aquí, dada la corta historia democrática de los Estados Unidos, que es la más larga del mundo, pareciera de corto plazo; pero hay resultados de sus elecciones que se predicen con geografía formada hace millones de años.
El IGAC colombiano define: “La geografía es la ciencia que estudia las relaciones entre la sociedad y el espacio”. Las sociedades, como el espacio, se construyen con el paso del tiempo—o el tiempo pasa en la construcción de sociedades y de espacio, que es lo mismo. Pero me estoy adelantando: volvamos al principio. Este capítulo es el anexo del anexo de la serie sobre Ucrania. La serie empezó para entender la guerra actual ruso-ucraniana, que descubrimos que tiene sus orígenes en la formación de un mapa hace casi mil doscientos años, en una tierra que ha sido habitada por decenas de culturas durante milenios gracias a que siempre fue muy fértil. Casi 90 días después (nada, para el Tiempo), la guerra está estancada en el sitio del Donbás, aunque lejos de terminarse; los miedos de una guerra mundial están más controlados, aunque latentes.
Cubierta la historia de esta historia, empezamos un anexo a la serie que fue crimeo: en todas las lecturas se mencionó la península cuya historia de anexiones se remonta a hace casi dos mil cuatrocientos años y a su relación con los antiguos griegos. Dos historiadores y geógrafos de la antigua Grecia, Heródoto y Estrabón, nos acompañaron en el cierre, que terminó con una relación, impensada al principio, con las amazonas, el Amazonas, y la historia helénica de Sudamérica—o la historia sudamericana de Europa, que es lo mismo. En esta larga odisea, nos vimos envueltos en medio de las elecciones en Francia, influenciadas por la relación de los candidatos con Rusia, y en medio de críticas de unos historiadores a otros por no hacer bien su trabajo, por no ser rigurosos con las fechas, los detalles y la geografía. Ahora bien, ¿por qué insisto yo, ñoño de corazón—en inglés, nerd—, en la importancia de la conexión entre historia y geografía? Muchas veces me pregunto por qué me interesa tanto un tema para otros un tanto aburrido. La respuesta siempre se me revela en otras fuentes. Algunas veces esa fuente es Twitter, la bendita y macabra red social que mezcla en ella lo profundo y lo mundano, lo bueno y lo malo, los cortos memes y los largos estudios, lo frívolo y lo reflexivo, lo temporal y lo atemporal; y donde todo, como el ser humano, es político. Como es característico de nuestra era, en esa fuente, muchas veces lo que se muestra no requiere más contextos, ni más palabras, ni más explicaciones que la superposición de un par de imágenes y menos de 280 caracteres. Extraigo de allí el cierre de mi caso sobre la historia y la geografía, trabajo del francés François Valentin, que muestra cómo mapas de hace cientos y miles de años tienen correlación, y hasta predicen, todavía, las elecciones de hoy en día. Aunque miles de años es darle mucha importancia al ser humano en la construcción de su Historia: el último mapa que vemos, mapa económico-social-político (inseparables entre sí), muestra un cordón blue en medio de un red state que se formó hace cien millones de años.
El hilo tuitero, del que vemos un extracto, menciona Alemania, Francia, Polonia, Lituania, Ucrania y Estados Unidos, estados en esta serie mencionados. Demuestra, como siempre decimos, que todo está conectado. El pasado forma el presente que forma el futuro, que se parecerá al pasado. El sitio de Ucrania sigue, mon siège est fait.
#Ucrania
#inevitabilidad de las cosas